El amor es el sentimiento más sublime entre todos, expresado a través de acciones, mensajes, declaraciones, poemas, etc. El amor tiene diferentes expresiones y los seres humanos lo sentimos y demostramos de manera diferente. ¿Sabías que existen 9 formas de amar desde el punto de vista del Eneagrama?
Estas formas de amar son tan importantes que podrían resolver algunas preguntas que sin duda alguna han nacido de tus experiencias amorosas:
- ¿Alguna vez te has sentido no correspondido/a?
- ¿Has esperado que te demuestren amor de una forma que nunca llegó?
- ¿Te has preguntado por qué tal o cual persona te demuestra su amor de manera diferente?
- ¿Has demostrado tu amor de una forma que no la han entendido?
- ¿Te han llegado a decir que no eres capaz de amar?
- ¿No has entendido alguna de las expresiones de su ser amado hacia tu persona al decirte que te ama?
Hablar de amor o de formas de amar, no sólo se refiere al amor de pareja, hablamos de cómo sentimos, expresamos y esperamos recibir amor de los padres, hijos, pareja, incluso de los amigos. De cómo expresamos el amor hacia nuestras mascotas. Así, cada uno de nosotros necesitamos entender que tenemos diferentes formas de amar que se expresan a través de distintas manifestaciones, todas, muy humanas.
A continuación, vamos a revelarte las 9 formas de amar según el Eneagrama, un interesante punto de vista para entendernos y entender al amor en su expresión, y lo haremos a través de «frases tipo» que podrías reconocer a través de ejemplos utilizando los Eneatipos.
«Recuerda que te amo como puedo y no como tú quieres que te ame, pero no significa que no te ame con todo mi ser»
9 formas de amar según el eneagrama
Evaluamos cada eneatipo en el Eneagrama para hablar de las 9 formas de amar que se manifiestan en las personas al expresar amor hacia su pareja. Comprenderlas ayuda a sobrellevar una mejor relación:
1. El perfeccionista.
Yo que soy cumplido/a y me gusta la disciplina te expreso mi amor siendo cumplido y haciendo lo correcto. Quiero que me ames poniendo atención a los detalles y no me critiques mi gusto por la perfección.
2. El Colaborador.
Yo te demuestro que te amo al preocuparme por ti. Quiero que me ames diciéndomelo y demostrándomelo con detalles.
3. El competitivo.
Quiero ser el mejor para ti, te demuestro mi amor siendo eficiente y buscando lo mejor para nosotros. Ámame valorando mi esfuerzo, sin criticar mi competitividad.
4. El creativo.
Te demuestro mi amor siendo expresivo/a con honestidad, apoyándote, siendo fiel, respetando tu espacio. Ámame permitiéndome ser yo mismo/a sin máscaras, no trates de amoldarme a ti.
5. El intelectual.
Yo necesito analizar las cosas y entenderlas, te demuestro mi amor siendo objetivo y tratando de ser el mejor. Denuéstame tu amor entendiéndome a mi y a mi mundo y creciendo junto conmigo.
6. El comprometido.
Yo necesito seguridad, por eso planeo y anticipo, te demuestro mi amor cuidándote y siendo precavido sobre nuestro futuro. Ámame cuidándote y asegurándome que todo va a estar bien.
7. El dinámico.
Soy espontáneo y divertido y necesito sentirme libre, te demuestro mi amor haciendo de tu mundo un lugar especial lleno de experiencias únicas. Ámame no siendo aburrido/a, sin hacer rutinas agotadoras, sin cortar mi libertad.
8. El líder.
Soy fuerte y me gusta demostrarlo. Te demuestro mi amor protegiéndote y tomando decisiones por los dos. Ámame valorándome y reconociendo mi fortaleza.
9. El pacificador.
«Peace and love» es mi frase, me gustan las cosas en calma. Te demuestro mi amor, dejándote ser y aceptándote tal como eres. Ámame, dejándome ser como soy, no discutamos no me gusta, dame paz y tranquilidad.
Como te habrás podido dar cuenta, cada ser humano desde su esencia, desde su personalidad ama y demuestra amor de forma diferente. Entender cómo nos demuestra amor el otro es una increíble forma de construir relaciones exitosas a todo nivel donde el amor intervenga.
Nota importante sobre las formas de amar en el Eneagrama
Ahora que hemos entrado en materia te contamos que, en el Eneagrama, las nueve formas de amar no son caminos fijos ni rígidos, sino expresiones dinámicas del corazón humano. Cada persona tiene una manera predominante de vivir el amor, pero esto no significa que su forma de amar sea estática o inmutable.
Así como el amor se adapta y evoluciona con la vida, en el Eneagrama también hay movimiento. Cada persona puede combinar o transitar entre diferentes estilos de amor según su crecimiento, sus desafíos y sus experiencias. Esto sucede por diversas razones:
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Las influencias cercanas: En el Eneagrama, cada tipo está rodeado de dos números adyacentes llamados «alas». Estas alas aportan matices a la forma de amar, dando mayor profundidad y riqueza a la expresión del afecto. Un Eneatipo 4 con una inclinación hacia el 3 puede mostrar un amor apasionado y expresivo, mientras que si se inclina hacia el 5, su amor puede ser más introspectivo y reservado.
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Los caminos de transformación: Cada Eneatipo tiene conexiones internas con otros números, lo que significa que su manera de amar puede cambiar según su estado emocional. En momentos de crecimiento, una persona puede integrar cualidades más elevadas de otro tipo, mientras que en tiempos de estrés, su amor puede teñirse de inseguridad o temor. Un Eneatipo 9 puede abrazar la determinación y la acción del 3 cuando está en su mejor versión, o reflejar la ansiedad y la duda del 6 cuando atraviesa dificultades.
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El viaje interno del amor: Dentro de cada tipo existen distintos niveles de desarrollo que influyen en la manera en que se vive el amor. En su versión más elevada, un Eneatipo 2 amará de forma generosa y desinteresada, mientras que en un estado de menor crecimiento, su amor puede estar marcado por la necesidad y la dependencia.
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La huella de la vida y el entorno: El amor no se vive en un vacío. Nuestras experiencias, nuestra cultura y las relaciones que construimos también moldean la forma en que sentimos y expresamos el amor. Aunque el Eneagrama nos ofrece un mapa, cada historia personal le añade su propio color y matices.
Comprender esto nos ayuda a aceptar que no hay una sola manera correcta de amar, sino múltiples formas legítimas y hermosas de hacerlo. Al final, el amor es un viaje, y en este camino, todos tenemos la capacidad de crecer, transformar y enriquecer la forma en que lo damos y lo recibimos.
