¡Qué difícil puede ser que nadie te lleve a su tormenta! Este tipo de eventos emocionales provocados por aquellas personas que ni cuenta se dan de cómo actúan y de cómo avanzan en la vida pisoteando valores y conductas adecuadas como el respeto!
Esta frase esconde muchas lecciones por aprender, como la de hacer el esfuerzo por superar la ausencia total de criterio, la permanente emisión de vibraciones negativas, la falta de inteligencia, la nulidad en cuanto a la empatía o inclusive, esa pésima costumbre de arrogarse justificaciones, aún en plena ejecución de faltas contra el prójimo.
De hecho muchas personas se hacen «historias positivas sobre sí mismos» que sólo son mensajes para «sacarte de tus casillas» porque no les representan o «asuntos de mitómanos», es decir, demasiadas «fábulas» a su alrededor que tampoco caen en espacios de veracidad. Y es duro decirlo, pero abundan, y pueden exigirte ser «tus amigos» pero sin embargo, no lo son.
Que nadie te lleve a su tormenta
No vivas «tormentas» de otros que no valen la pena
A veces en la vida, nos encontramos con personas que parecen estar en medio de una tormenta constante y podría ser que, inclusive no tengan el más mínimo reparo en ocultarlo, pero mantener su objetivo: acercarte al descontrol emocional.
Su energía negativa nos afecta y nos arrastra a un estado emocional similar al suyo. Pero debemos recordar que cada uno de nosotros tiene la capacidad de elegir qué sentimientos y emociones permitimos que nos afecten, por ello lo recomendable es velar por que nadie te lleve a su tormenta y buscar la tranquilidad emocional siempre.
Actitudes positivas para proteger tu energía
No te dejes arrastrar por la tormenta de los demás. Mantén una actitud positiva y protege tu energía. Aprende a identificar las situaciones que te afectan y busca maneras de alejarte de ellas.
No te sientas obligado ni obligada, a estar cerca de personas que te hacen sentir mal. Busca aquellos que te aporten paz y alegría, y rodéate de ellos. No permitas que la negatividad de otros te quite la oportunidad de disfrutar de la vida.
Recuerda que siempre puedes elegir cómo responder a las situaciones difíciles. Que nadie te lleve a su tormenta, busca la calma dentro de ti. Aprende a cuidar de ti mismo y a mantener tu equilibrio emocional, incluso en los momentos más difíciles.
¿Qué técnicas de autocontrol podríamos aplicar en este caso?
Primero que nada, asegúrate de alejarte de la fuente o emisión, es decir, de las personas que te acercan a sus comportamientos negativos y obtienen de ti lo peor. Ese primer paso te ayudará a continuar en el proceso.
Existen varias técnicas de autocontrol que podemos aplicar cuando nos enfrentamos a situaciones difíciles y negativas que podrían afectar nuestro bienestar emocional. Algunas de estas técnicas son:
- Identifica tus pensamientos: Presta atención a tus pensamientos y a las emociones que despiertan en ti. Si tus pensamientos son negativos, intenta cambiarlos por otros más positivos y realistas.
- Practica la respiración profunda: La respiración profunda puede ayudarte a calmarte y a reducir el estrés. Inhalando profundamente por la nariz y exhalando lentamente por la boca puedes reducir la frecuencia cardíaca y la tensión muscular.
- Haz ejercicio: El ejercicio es una excelente manera de reducir el estrés y liberar tensiones. Además, la práctica regular de actividad física puede ayudarte a mantener un estado de ánimo positivo.
- Busca apoyo social: Habla con amigos o familiares en quienes confíes y que te brinden un apoyo emocional positivo. El hecho de contar con alguien que te escuche y te brinde su ayuda puede resultar muy beneficioso.
- Practica la meditación: La meditación es una práctica que puede ayudarte a calmar la mente y reducir el estrés. Puedes empezar con meditaciones cortas y aumentar el tiempo de práctica a medida que te sientas más cómodo.
- Aprende a decir «no»: Si te encuentras en situaciones que te generan malestar emocional, aprende a decir «no» y establecer límites saludables. No te sientas obligado a estar presente en situaciones que no te aportan nada positivo.
- Sé consciente de tu lenguaje corporal: Tu lenguaje corporal puede influir en tu estado de ánimo. Intenta mantener una postura abierta y relajada y evita tensar los hombros o fruncir el ceño.
- Aléjate de la fuente: No siempre podrás sostener la inmensa negatividad que puedes sentir desde quienes te quieren llevar a su tormenta. Algunas veces tendrás que cortar por lo sano y pasar la hoja para poder controlar el panorama.
Estas son algunas de las técnicas de autocontrol que puedes aplicar para que nadie te lleve a su tormenta y puedas proteger tu bienestar emocional en situaciones difíciles y estresantes. Recuerda que cada persona es diferente, por lo que lo que funciona para algunos puede no funcionar para otros. Prueba diferentes técnicas y encuentra las que mejor se adapten a ti.
Ejemplos de momentos donde podemos perder el control
«No dejes que nadie te lleve a su tormenta» significa en pocas palabras, no dejes que las personas que quieren que te estreses, te hagan perder el control. Hemos creado una lista breve para que podamos revisar algunas situaciones donde es posible que nos enfrentemos a personas que nos lleven a sus tormentas, algunas de ellas podrían ser:
- Discusiones en el trabajo: En el entorno laboral, es común que se presenten situaciones de estrés que pueden desencadenar discusiones y conflictos con compañeros de trabajo. Si una persona está pasando por una situación difícil o tiene problemas personales, podría proyectar su frustración y enojo en los demás, lo que puede llevar a un ambiente laboral tenso e incómodo. Por ello, no dejes que nadie te lleve a su tormenta, porque el clima laboral será el principal afectado.
- Problemas familiares: Cuando se presentan problemas en el seno familiar, como conflictos con la pareja, discusiones con los hijos o problemas financieros, es posible que las emociones negativas se desborden y afecten el ambiente en el hogar. En estas situaciones, es importante buscar soluciones pacíficas y evitar caer en el juego de culpas y reproches que solo empeoran la situación.
- Relaciones tóxicas: En relaciones tóxicas, ya sea de pareja o amistad, es común que una persona trate de manipular y controlar a la otra a través de la culpa y la manipulación emocional. En estos casos, la persona manipuladora puede proyectar sus propios miedos e inseguridades en la otra persona, lo que puede generar una tormenta emocional.
- Problemas en la comunidad: En ocasiones, puede haber problemas en la comunidad, como discusiones con vecinos, protestas o conflictos políticos que pueden generar tensiones emocionales en las personas involucradas. Es importante buscar soluciones pacíficas y respetar las opiniones de los demás.
- Redes sociales: En las redes sociales, es común encontrar comentarios negativos, insultos y ataques que pueden generar emociones negativas en quienes los leen. En estos casos, es importante mantener una actitud crítica y evitar caer en discusiones que solo empeoran la situación.
- Diferencias culturales: Parece mentira pero en mucho, las diferencias culturales pueden provocar malestar entre las personas. Y una cosa es respetarlas, y otra que a pesar de entendimientos, estos se quiebren porque una de las personas -desde su cultura- no valora la formalidad de la otra.
Es importante recordar que cada persona es diferente y que la forma en que se manejan las emociones y los conflictos también es diferente. Lo importante es aprender a proteger nuestro bienestar emocional y buscar soluciones pacíficas para resolver los conflictos, pasar la hoja y abandonar esa relación que no nos suma en lo absoluto y ya sabes: ¡Que nadie te lleve a su tormenta protege tu bienestar emocional!
Contenidos recomendados en BienyFeliz.com
- No dejes que la gente te arrastre hacia su tormenta | Shurya.com
- 10 premisas de vida en el Decálogo de la lógica (overflow.pe)
- ¿Frecuencias vibratorias? ¿Mito o realidad? – Bien y feliz
- Cómo controlar las emociones, con 12 estrategias eficaces (psicologiaymente.com)