La crianza positiva es una filosofía que busca promover el desarrollo saludable y feliz de los niños a través de relaciones familiares basadas en el respeto mutuo, la comunicación abierta y el afecto. Una propuesta de estilo de vida para quienes desean conformar una familia saludable y enfocada en la equidad. Cuando hablamos de feminismo (igualdad) podemos enfocarnos en este tipo de concepto al hablar de la familia.
En esta perspectiva, tanto la madre como el padre juegan un papel fundamental en el crecimiento y la formación de los hijos.
Crianza positiva: labor de ambos padres
Acerca de la crianza positiva
La filosofía de crianza positiva no tiene un solo creador o definidor específico, ya que es un enfoque que ha evolucionado a lo largo del tiempo y ha sido influenciado por diversas corrientes de pensamiento en psicología, pedagogía y desarrollo infantil. Sin embargo, se puede atribuir su popularización y difusión a varios expertos en el campo de la psicología y la crianza, así como a organizaciones dedicadas a promover prácticas parentales saludables.
Algunos de los profesionales que han contribuido significativamente a la promoción de la crianza positiva incluyen a Alfred Adler, Rudolf Dreikurs, Jane Nelsen, Lynn Lott, y H. Stephen Glenn, entre otros. Estos autores y muchos más han desarrollado y compartido conceptos clave, estrategias y técnicas para fomentar una crianza basada en el respeto mutuo, la comunicación efectiva y el establecimiento de límites claros, todo ello con un enfoque en el bienestar emocional y social de los niños.
Es importante tener en cuenta que la crianza positiva es un enfoque que continúa evolucionando con la investigación y la práctica, y se adapta a las necesidades cambiantes de las familias y la sociedad en general. Por lo tanto, no se puede atribuir a una sola persona su definición o creación, sino que es el resultado de la colaboración y contribuciones de numerosos profesionales y expertos en el campo.
Aspectos clave de la crianza positiva
A continuación, se explorarán ocho aspectos clave donde se destaca la contribución de ambos padres en la crianza positiva.
- Participación equitativa en las tareas del hogar Ambos padres deben compartir responsabilidades domésticas de manera equitativa, lo que no solo enseña a los hijos el valor del trabajo en equipo, sino que también fomenta la igualdad de género y el respeto por el trabajo de cada uno.
- Modelado de roles de género no tradicionales Es importante que los padres muestren a sus hijos que las responsabilidades y habilidades no están determinadas por el género. Al involucrarse en actividades consideradas «típicamente femeninas» o «típicamente masculinas», los padres desafían estereotipos y promueven la diversidad y la inclusión.
- Comunicación efectiva y coherente Tanto la madre como el padre deben comunicarse de manera clara y consistente con sus hijos, estableciendo límites y expectativas de manera conjunta. Esta comunicación abierta crea un ambiente de confianza y comprensión mutua dentro del hogar.
- Demostración de afecto y apoyo emocional Ambos padres desempeñan un papel crucial al demostrar amor, afecto y apoyo emocional hacia sus hijos. Esta demostración de afecto promueve una autoestima saludable y fortalece el vínculo emocional entre padres e hijos.
- Coaching y modelado de habilidades sociales Padres que trabajan juntos pueden enseñar a sus hijos habilidades sociales importantes, como empatía, resolución de conflictos y trabajo en equipo. Al modelar estas habilidades en su propia interacción, los padres brindan a sus hijos un ejemplo a seguir en sus relaciones con los demás.
- Fomento de la autonomía y la responsabilidad Ambos padres deben alentar la independencia y la responsabilidad en sus hijos, proporcionándoles oportunidades para tomar decisiones y asumir consecuencias. Esta práctica fortalece la autoconfianza y la capacidad de autogestión de los niños.
- Colaboración en la resolución de problemas En situaciones difíciles o conflictivas, los padres deben colaborar para encontrar soluciones efectivas y pacíficas. Al trabajar juntos en la resolución de problemas, enseñan a sus hijos habilidades de negociación y cooperación.
- Cohesión familiar y tiempo de calidad Finalmente, es fundamental que la familia pase tiempo de calidad juntos, participando en actividades compartidas y creando recuerdos positivos. Tanto la madre como el padre contribuyen a la cohesión familiar al dedicar tiempo y atención a sus hijos de manera equitativa.
Conclusiones importantes sobre la crianza positiva
La crianza positiva es un esfuerzo conjunto que requiere la colaboración y el compromiso tanto de la madre como del padre. Al trabajar juntos, ambos padres pueden crear un ambiente familiar amoroso y de apoyo que promueva el bienestar y el desarrollo óptimo de sus hijos. La igualdad de roles y responsabilidades entre ambos progenitores es esencial para cultivar relaciones familiares saludables y equilibradas.
